Del dicho al hecho hay un trecho. Es una expresión popular que bien puede aplicarse al tema de los minerales en conflicto. Por fin ha salido una ley del Parlamento Europeo para regular los minerales en conflicto, pero ahora empieza el duro camino de hacerla cumplir. El contraste entre lo que sale del Parlamento Europeo y lo que se hace en una mina artesanal del este del Congo es muy grande. Un contraste tan grande como la distancia física, emocional y hasta ontológica que existe entre el edificio impoluto del Parlamento Europeo y el barro que lo cubre todo en una mina congoleña. Esa distancia puede reducirse, aunque sea un poco, garantizando que se pongan en marcha algunas medidas de acompañamiento, mientras comienza el largo proceso de implementación de la nueva ley.
De acuerdo a un informe recientemente publicado por la Red Europea para África Central (EURAC) en materia de minerales en conflicto, es necesario distinguir dos grandes objetivos:
1) el cambio de las prácticas de suministro de las empresas europeas y
2) la mejora de las condiciones económicas, sociales y de seguridad de la gente que trabaja y vive en las minas del este de la RD Congo.
Las medidas de acompañamiento pretenden contribuir a este segundo objetivo. Para ello, un paso previo es interiorizar y aceptar el rol clave que cumple la minería artesanal en la economía del este de la RD Congo.
La minería artesanal representa un gran dilema ético. Existe y no desaparecerá porque pensemos que es un sector sucio, complejo, riesgoso, de bajo capital y tecnología y tremendamente complicado de gestionar. Es anacrónico que haya personas excavando estaño o tantalio con pico y pala en los tiempos del Internet de las cosas y de la revolución industrial 4.0. Como ciudadanas y ciudadanos del mundo, su existencia resulta profundamente paradójica y perturbadora. Pero es una realidad de nuestra casa común y tenemos la responsabilidad de reflexionar y actuar ante ella.
En la red Justicia en la Minería, estamos de acuerdo con EURAC en que el sector de la minería artesanal es un sector económico legítimo del este de la RD Congo. Encuadrado en un marco político apropiado, consideramos que el sector de la minería artesanal podría contribuir positivamente al desarrollo local. Las medidas de acompañamiento deberían servir para fortalecer a los actores locales a combatir el fraude, apoyar la gobernanza local del sector minero y promover el diálogo con el gobierno congoleño y con otros gobiernos de la región de Grandes Lagos.
- Para leer, el resumen ejecutivo de las medidas de acompañamiento (en inglés)>
- Para leer el informe completo (en francés) >
- Para leer el informe completo (en inglés) >
Alicia Alemán Arrastio (Del área de Estudios y Propuestas formativas de la ong ALBOAN)
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